Tu boca no se ha dado cuenta aún, de que mis labios son motor para arrancar.

El lobo más pequeño y claro ladró advirtiente a su hermana y salió disparado hacia ella, no volveríaa dejarla sola, aunque luego recibiera una golpiza de su parte. Olfateó el aire busscando a alguien más pero parecía que la mujer andaba sola, no podía ser una gran amenaza y hasta parecía asustada de ellos.

Y si no quiere atacar? les preguntó a los demás mirandolos a ambos, inocente.

Se agazapó a distancia de su casi completa manda y del vampiro. Era suficiente. El no atacaría para matar. Admitía que él había empezado.

Escuchando a Seth, se adelantó al enano y se acercó a la vampiro. Tan solo la olisqueo, bajando la cabeza.

No puede creer que ambos se harán a un lado. Esa vampíro, su olor delataba que no era nada bueno y ellos la iban a dejar ir, no podía creerlo.
Estaba demasiado distraída tratando de mantenerla a raya y en callar sus pensamientos cuando la vampíra la ataca. El dolor que siente a partir de allí es inexplicable.
Su piel arde, quema. Tan sólo fue un pequeño raguño para Leah, pero los colmillos de la vampira son veneno, ácido en cuerpo.

La loba cae hacia atrás en un aullido fuerte y lastimero. Intenta ponerse en pie pero a penas se yerge, cae entre temblores.

Maldito él y su bocota. Seth gruñó cuando su hermana se abalanzó hacia la vampira. Fue hacia ella rapidamente, podía sentir el dolor de su hermana como si fuera propio. Lamió la herida alerta aún a la rubia, no dejaría eso así, no podía perder a nadie más. El lobo aulló hacia la dama blanca en el cielo y arremetió contra ella, tumbandola nuevamente, se sentpo encima, como si se preparara para devorarsela.

Observó todo aquello, pero no podía hacer nada. LEah ya estaba herida, y había que llevarla rápido a descansar.

"Seth, llevate a Leah con la manada."

Sabe que si el joven Clearwater sale herido, jamás se lo perdonaría, siquiera Leah se lo perdonaría.

"Ahora Seth"

Repitió aquello gruñendo al lobo menor, como si fuese el líder en ésos momentos. PEro era instinto familiar.
Saltó en contra del lobo, que aún se hallaba sobre la vampira. Leve, logró empujarlo de encima de la rubia, quedando él delante de la vampiro a metros de distancia, protegiéndola de alguna manera. No la protege en verdad, solo trata de salir él lastimado en vez de Seth.

La distracción le jugó una mala pasada. No mala, muy mala pasada. Ella sabe que es capaz de detener a la vampíro pero todo en su cabeza era un opción más para distraerse, empezando por Jacob y terminando con la preocupación por su hermano pequeño.

La loba gris queda atrás dejando a una mujer morena tirada en el piso, semi inconsiente y con un lado de su cuerpo bañado en sangre.

El empujón de Jacob lo hizo saltar hacia adelante, Seth corrió hacia su hermana gruñendo, como si el lobo protestara hasta que esos gruñidos se convirtieron en protestas reales, el moreno apareció con solo unos pantalones cortos, la suerte era que no estuviera desnudo como en anteriores ocaciones. Fue hacia Leah y la levantó del suelo, demasiado grande para sus manos. - Puedes volver hermanita? - preguntó a la loba herida.

Le gruñe a Seth nuevamente. Cree, o al menos espera, que el pequeño morocho entienda que debe llevársela en ése mismo momento. La Manada sabría que hacer para curarla cuanto antes posible.

Da la espalda a los Clearwater, depositando sus ojos en la vampiro. LA mira con rudeza. No va a matarla, pero esperaba se fuera sino quería que la lastimara aún más.

Leah salió de la fase cuando Seth la levantó a penas, no por que quisiera, simplemente no podía mantenerse como loba, estaba muy malherida.
Sus ojos se mantienen cerrados y su cuerpo no le responde. Las heridas cmenzaron a sanarle pero hay que curarla bien, tienen que llevarla rápido donde Emily.